Solo 47
años y medio vivió Bolívar, corta fue su
vida pero grande e inmortal su obra: La consolidación de parte de la Independencia
Política de la
América española.
Fue un hombre
polifacético, hombre de pensamiento y de acción, guerrero, estadista, escritor
y creador de naciones. Condujo al pueblo latinoamericano al total triunfo
contra un caduco orden colonial.
Su grandeza
esta en la compenetración con el pueblo para así poder dirigirlo y llevarlo al
triunfo.
No busco el
poder por el pueblo mismo sino para servir al pueblo. Busco transformaciones
sociales que intereses mezquinos hicieron fracasar.
Sus ideas
están todavía vigentes en estos tiempos, fue promotor de la integración
latinoamericana. Se refería a la creación de organismos internacionales que
propiciaran un dialogo entre las diversas culturas.
Pero no
debemos exaltar tanto su figura olvidándonos que Bolívar fue todo un hombre autentico, con virtudes y
defectos.
Fue sin lugar
a dudas un gran hombre y representa una de las principales figuras del siglo
XIX.
Él es y será
modelo a imitar, por su determinación y
fuerza de voluntad. Es de imaginar que muchas veces se sentiría desfallecer
pero siempre siguió el dicho aquél: “Si caes siete veces levántate ocho.”
Lucho por sus
ideas y por sus sueños siguiendo un camino directo. A él debemos agradecerle
que nos dio Nación, identidad y honor.
Nació rico y
murió pobre: Sin siquiera una camisa que no estuviera rota. Consunto toda su
fortuna en la Revolución.
Solo nos queda
por decir:
¡Gracias
Bolívar!
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