De
ahora en adelante te llamaré " el vecino " o " los vecinos " me niego a
nombrarte a ti y a los traidores que pueblan tu tierra, mucho menos
llamarte " hermana "
Lo mío era tuyo, te abrí las puertas de mi casa, le di cobijo a tus hijos y cuando me descuidaba te llevabas mi comida, mi gasolina y mis medicinas cuando pudiste habermelas pedido que con gusto te las habría dado porque siempre te considere mi hermana.
Hoy una vez más te tiendo mi mano y la vuelves a rechazar, prefieres seguir maltratandome junto a los que históricamente han sido nuestros enemigos y que nos consideran su cagadero. Ya no hay más nada que decirnos, entendí por la fuerza y con mucho dolor que Santander pervive aún en el espíritu de quienes te pueblan.
Traidora, taimada y embustera, chula, cualquiera te va mejor que llamarte Colombia, un nombre que desde nuestra independencia hasta la fecha se han encargado en mancillar quienes mal te han gobernado.
Por último te digo que si se te ocurriese volver a agredirme o a mis hijos te responderé con tal contundencia que cuando te vea en cenizas sentiré pagada la deuda histórica que desde hace más de 200 años tenemos por saldar.
Sin otro particular que agregar y esperando vivas momentos interesantes.
Atte. Venezuela
Atte. Venezuela
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